Uno de los puntos positivos de vivir en “La millor terreta del món” es que, cuando llega el verano, aunque no tengas planeadas las vacaciones del siglo, cualquier fin de semana puede convertirse en una escapada perfecta. Solo tienes que coger la bolsa de playa, con unas toallas, un bañador, crema y listo. No es que sienta yo un orgullo extraordinario por la costa alicantina, pero es que, objetivamente, a menos de una hora en coche puedes encontrarte el plan perfecto para el día en calas magníficas.
Y, precisamente, esto fue lo que hicimos el sábado pasado. Siguiendo las recomendaciones de los blogueros benidormenses de Más allá de la ciudad, nos dirigimos hacia La Vila para descubrir la Cala de la Higuera, más conocida como La Caleta.
Hay que decir que nos quedamos sorprendidas por la cala. Puede ser que fuera por no llevar muchas expectativas, pero la verdad es que no esperábamos encontrarnos un recoveco así, tan vacío en pleno verano.
¿Qué encontrarás?
La Caleta, también conocida como La Higuera, está formada por pequeños cantos y se encuentra flanqueada por dos barrancos que enmarcan la perspectiva, con el mar al frente. Esta pequeña cala escondida no tiene una ocupación muy alta, ya que para acceder a ella hay que llegar hasta el hotel BlueSense Villajoyosa. Da la impresión de ser una cala de acceso privado, pero no os acobardéis y seguid adelante. Todas las playas de España son de uso público, así que no hay problema.

Lo que sí que es cierto es que para acceder hay que pasar por las instalaciones del hotel BlueSenses Villajoyosa, y no será hasta después de atravesar una superficie de césped, cuando alcanzaremos por fin la playa. La zona está dividida en dos mitades por una roca que, probablemente, cayera en su momento de uno de los acantilados que la bordean. Nosotras al llegar tiramos hacia el lado derecho de la cala, ya que parecía tener un acceso más sencillo al mar. Aunque el uso de calzado para las rocas sería adecuado, las chanclas tampoco son una mala opción (nosotras con eso nos apañamos!).


Una vez dentro del agua, la visibilidad no es muy buena debido al oleaje continuo que llega a la cala. Esto provoca que se levante la arena, dándole un color claro al agua de la orilla, pero evitando también una buena visualización de la zona a la hora de hacer snorkel. Aun así, algún que otro pececillo puede verse en la orilla, así como en la superficie del agua cuando te adentras un poco.
¿Cómo llegar?
Poner Hotel BlueSenses Villajoyosa en el Google Maps y seguir las indicaciones hasta allí. Si vas desde Alicante y entras a Villajoyosa desde la N-332, el camino es sencillo. En el primer semáforo que encuentres al entrar en la Vila, debes girar a la derecha, hacia una calle que discurre paralela a la carretera por la que venías, pero en sentido contrario. Al final de esa calle (que sube y baja varias veces), encontraréis el parking del hotel. Es posible que haya un encargado de dirigir el tráfico, que te dirá dónde debes aparcar. Una vez dejado el coche, el acceso a la cala se hace a pie por el camino que hay a la izquierda del hotel, que discurre entre las instalaciones del BlueSenses.
La cala cuenta con baños, lavapiés, chiringuito y socorristas. Todas las facilidades del mundo en este rinconcito de nuestra costa.